Red Riding Hood


Justo apenas hace una semana Hollywood nos recetó la versión moderna del clásico La Bella y la Bestia convertido en filme juvenil (aka Beastly), y ahora le toca el turno al famoso cuento infantil Caperucita Roja de transformarse en una cinta llena de romance y suspenso dirigida al público adolescente. De la mano de Catherine Hardwicke (Thirteen, Twilight), Red Riding Hood recorre un territorio muy conocido ya por la audiencia y que resulta imposible no comparar con el anterior trabajo de la directora: la primera parte de la afamada saga de vampiros Twilight. Ambas películas son muy semejantes no solamente en su estilo, sino también en retratar un triángulo amoroso y en tratar a toda costa de generar una nueva franquicia que compita contra Bella, Edward y compañía, pero en esta ocasión de la mano de un estudio más grande como lo es Warner Brothers.

En Red Riding Hood, Valerie (Amanda Seyfried) vive junto a su familia en una pequeña comunidad medieval situada en medio del bosque. De pronto, la tranquilidad del pueblo se perturba cuando la hermana de Valerie pierde la vida al ser atacada por un misterioso lobo que lleva años aterrorizando a la aldea cada que hay luna llena. Es entonces cuando el pueblo recurre al padre Solomon (Gary Oldman) para ayudarles a encontrar a la bestia y acabar de una vez por todas con ésta. La búsqueda pronto apunta a Valerie como la principal sospechosa, luego de que ésta logra platicar con la criatura y varios testigos la delatan. A partir de ese momento, el filme se convierte en un whodunit aunque con muy pocas sorpresas y giros inesperados.

En cuestión de historia, la cinta no aporta nada nuevo. Es más, hace que Twilight parezca una joya literaria a su lado. Empezando por el pseudo triángulo amoroso que plantea la película que nadamás no termina de cuajar y al cual hay que añadirle lo gris que resultan ambos protagonistas masculinos, quienes básicamente le dejan todo el paquete del filme a Amanda Seyfried. No se si habrá sido la falta de experiencia, lo pobre del guión, una mala dirección o todas las anteriores, pero de entre los tres leads juveniles, solamente Seyfried logra un trabajo un poco más convincente.

Fuera de todo esto, la película mantiene un ritmo ágil sobretodo hacia el final y obviamente deja la posibilidad de una futura franquicia, aunque en lo personal lo veo como algo dudoso. No creo que Red Riding Hood vaya a tener el mismo alcance que Twilight y al menos en los Estados Unidos no la veo recaudando más de 100 millones de dólares. Habrá que ver cual es el comportamiento de la cinta a nivel internacional, donde yo le veo más futuro y ya después hablaremos sobre una segunda parte o no. En resumen, es una cinta para pasar el rato, con una historia trillada y con un reparto desangelado que se redime un poco gracias al carisma de su protagonista.

Calificación: **

0 comments: