The Reader

Estados Unidos/Alemania, 2008

Dirige: Stephen Daldry

Con: Kate Winslet, Ralph Fiennes y David Kross

Tal pareciera que el 2008 fue el gran año de Kate Winslet. Justo antier me lanzé al cine a ver Revolutionary Road, donde quedé impresionado con su tremenda actuación, y un día más tarde veo The Reader, también protagonizada por Winslet, y me doy cuenta de lo versátil que es como actriz y como de manera sorprendente, nos ofrece dos excelente papeles, interpretando a mujeres completamente diferentes.

En The Reader, drama erótico del mismo director de The Hours, Kate Winslet se mete en el pellejo de Hanna Schmitz, una mujer alemana que trabaja como inspectora de boletos del tranvía de la ciudad. Por azar del destino, conoce al joven Michael justo cuando éste se encuentra vomitando afuera del edificio donde Hanna vive. A partir de ese momento, la vida de ambos personajes cambia radicalmente. Pronto, Michael se convierte en el joven e inexperto amante de Hanna. Y mientras él disfruta de los momentos de intimidad junto a Hanna, ella únicamente le pide a cambio que le lea.

El tiempo pasará, Michael estudiará leyes solo para más tarde encontrarse con su amante de pubertad (y probablemente el amor de su vida?) en plena corte, cuando ésta es acusada de la muerte de varios judíos en un campo de concentración, mientras Schmitz trabajaba como guardia para los nazis. A partir de ese momento, la cinta se enfoca en la confrontación moral por la cual atraviesan los personajes, entre distinguir el bien del mal, lo correcto de lo incorrecto, lo que se puede perdonar y lo que jamás se podrá olvidar.

The Reader es un filme realizado con mucha inteligencia y confeccionado con mucha sutileza. Es una película que más allá de presentar los dilemas de cada personaje y mostrarnos sus sentimientos, lo que piensan y lo que sientes, nos concede a la audiencia el rol de jueces, dándonos la libertad de interpretar las razones detrás de las acciones que realizan los personajes a lo largo de la cinta.

Si bien, Winslet sobresale por su actuación, el joven David Kross también brinda una actuación sólida e igual de arriesgada que la de su co-estrella, y lo digo porque ambos muestras cero inhibiciones al momentos de quitarse la ropa y compartir escenas que son tremendamente eróticas, pero que jamás resultan irrelevantes al tipo de historia que se narra. Más que ser otro drama más del Holocausto, The Reader es una reflexión acerca de la responsabilidad moral, la justicia y el perdón.